Todo parece indicar que por todo el mundo, los profesores nos hemos tenido que meter a ordenar nuestras clases en los ordenadores... Por una parte me da gusto, por otra parte, me asusta. ¿Dónde va a quedar la delicia que es ver los ojos, las caras de sorpresa cuando nuestros alumnos entienden algo? Clementina, en México, D.F., con influenza y todo. clemenpd@hotmail.com
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Todo parece indicar que por todo el mundo, los profesores nos hemos tenido que meter a ordenar nuestras clases en los ordenadores... Por una parte me da gusto, por otra parte, me asusta. ¿Dónde va a quedar la delicia que es ver los ojos, las caras de sorpresa cuando nuestros alumnos entienden algo?
Clementina, en México, D.F., con influenza y todo.
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